Hay muchos factores que pueden causar dolor crónico , incluido un mal colchón y úlceras de estómago. Los efectos psicológicos del dolor pueden desarrollarse después de que se repara el problema físico, incluso cuando la causa es la lesión o enfermedad.
Síntomas del dolor crónico
Hay varias formas de dolor crónico. En la mayoría de los casos, una persona con fibromialgia siente un dolor persistente que se vuelve rígido y doloroso con el tiempo. Existe un rango de severidad del dolor dependiendo de la condición de salud subyacente que lo está causando. El dolor crónico de una persona también afecta muchos otros aspectos de su vida debido a su persistencia y larga duración. Esto también puede provocar los siguientes síntomas para el paciente:
Dado que el dolor es algo poco común en la mayoría de las personas, puede estar bien modulado. A medida que sana el tejido dañado, experimenta un intenso estallido de dolor que desaparece gradualmente. El dolor crónico también ocurre cuando los tejidos dañados permanecen durante más de seis meses. El dolor crónico continúa mucho después de que se cura una lesión o enfermedad. Eso es diferente del dolor agudo, que desaparece con el proceso de curación. A veces, el dolor puede incluso empeorar con el tiempo. El tratamiento del dolor crónico es, por lo tanto, extremadamente desafiante. Hay muchas formas en que una persona puede sobrellevar el dolor crónico según su situación. Un cierto porcentaje de personas experimenta una reacción de gran tamaño a los impulsos de dolor en el sistema límbico, un centro del cerebro que procesa las emociones. Los síntomas del dolor pueden verse amplificados por el estrés, la depresión y la ansiedad.
Algunos factores de riesgo comunes incluyen:
En los casos en que el dolor se extienda más allá de lo esperado, es vital tratarlo para que no se vuelva crónico. Quienes padecen trastornos que provocan dolor crónico también pueden consultar a nuestros médicos especialistas sobre posibles tratamientos para el alivio del dolor. Hay varios tratamientos disponibles para el dolor de cuello y espalda que incluyen analgésicos, medicamentos, biorretroalimentación, entrenamiento de relajación, hipnosis y técnicas de distracción. Un especialista en dolor no es necesario para la mayoría de los pacientes que sufren de dolor. No obstante, si su dolor persiste por un período más prolongado, nuestro especialista puede programar un examen médico para diagnosticar su problema y ofrecer un servicio profesional de manejo del dolor.